Como os hemos comentado en post anteriores, uno de los elementos imprescindibles, tanto para el logotipo de una empresa como para su cartelería corporativa, es la tipografía. La elección de un tipo concreto de letra entre las principales familias tipográficas va más allá de un simple medio para promocionar un mensaje, ya que la tipografía es un mensaje por sí misma. Por ello, es muy importante prestar atención a la elección de la tipografía.
Existen diferentes familias tipográficas y hoy os vamos a hablar de ellas.
Los dos grandes grupos de tipos de tipografías que se pueden reconocer con cierta facilidad en son: por un lado, los de las tipografías que sirven para textos de largo alcance, es decir tipografías que deben leerse con facilidad, y por otro lado estarían las tipografías de rótulo, tipografías que deben llamar la atención sobre todo, pero que no son recomendables para textos largos.
Dentro de las tipografías de largo alcance, podemos distinguir cinco grupos principales para etiquetar todas las tipografías que existen.
Tipografías Serif, con Serif o Roman. Esta familia tipográfica tiene unos remates muy característicos en los extremos de las letras, conocidos con el nombre de Serif, podemos decir que son como adornos. Estas fuentes nos trasmiten autoridad, firmeza y confort ya que su estilo tipográfico es bastante clásico.
Serifa, zapata, patíno o remate: Trazo pequeño que remata a un asta principal de un caracter. Se puede extender a un solo lado del asta o se puede extender hacia ambos lados del asta en forma simétrica.
Las tipografías Romanas Antiguas poseen serif triangular y presentan diferencias en los trazos. En general son tipografías con buena legibilidad y se utilizan habitualmente para textos de largo alcance. (Ejemplos: Garamond / Times / Bembo)
Este estilo fue perfeccionado en el siglo XVIII pero es de las más actuales por su combinación de trazos finos y gruesos. Las tipografías Romanas Modernas o también llamadas Didonas, presentan serif lineal y una gran diferencia entre los trazos gruesos y finos. Al igual que las romanas antiguas, derivan de los textos esculpidos en piedra, en las construcciones y monumentos romanos. (Ejemplos: Bodoni / Modern / Didot)
Fue descubierto en las inscripciones griegas hacia el año 1815. Las tipografías Egipcias se distinguen principalmente por el serif cuadrangular. Pueden presentar o no diferencia en los trazos. En general son más pesadas que las romanas, y son utilizadas frecuentemente para títulos o rótulos. No es aconsejable su uso para textos largos pero es atractiva y es ideal para publicidad. (Ejemplos: Clarendon / Serifa / Schadow)
Tipografías Lineales, Sans Serif o Paloseco. Del francés Sans “sin” Serif, serifa o patines. Como su enunciado nos indica, se trata de las sin serif. Las fuentes Sans Serif son las que van sin patines o pies. Es decir, no tienen remates en sus extremos. Este tipo de fuentes están compuestas por letras de palo seco, sin ningún tipo de adorno en el remate de su estructura. Con estas letras transmitiremos modernidad, seguridad, sobriedad o alegría. Sin embargo, es importante que tengamos cuidado a la hora de utilizar esta familia tipográfica, ya que se recomienda usar en textos cortos porque si son muy largos puede dificultar la lectura.
Las tipografías de paloseco geométricas no presentan ningún tipo de serif o remate ni diferencia en los trazos. Se caracterizan por una construcción rígida, donde predominan las formas geométricas en apariencia puras. Las rectas pronunciadas y las formas circulares hacen que no sea una tipografía aconsejable para la utilización en bloques de texto. (Ejemplos: Avant Garde / Futura / Kabel)
Las tipografías Neo-grotescas, al igual que las geométricas, no presentan serif, sin embargo ostentan trazos con mayores modulaciones y una construcción mucho más dúctil y dócil, resultado de cuidadosas correcciones ópticas. Del grupo de las tipografías sin serif, son en general unas de las más utilizadas para textos de corto y mediano alcance. Las tipografías Neo-grotescas presentan muy buena legibilidad en palabras o frases cortas, por lo que son consideradas como las más apropiadas para ser empleadas en señalizaciones. (Ejemplos: Helvetica / Frutiger / Univers)
Las tipografías de estilo Humanista, al igual que las geométricas y neo-grotescas, no presentan serif. Exhiben modulaciones en sus trazos, aunque puede o no existir diferencia entre ellos. Se distinguen por un aspecto suficientemente orgánico como para ser consideradas como las de mejor rendimiento de lectura, entre las familias tipográficas sin serif. (Ejemplos: Optima / Gill Sans / Britannic)
Tipografía manuscrita, gestual o script. Este tipo de fuentes simulan una caligrafía escrita, siendo a menudo cursivas. Suelen utilizarse para resaltar la importancia de los titulares o para firmas de autor.
Las tipografías gestuales expresan la fuerza y la gracia del trazo hecho a mano. Las fuentes de este estilo, que aparecen en los sistemas informáticos, “imitan” la escritura a mano puesto que, sin dudas se basan en la escritura manuscrita, pero han sufrido una serie de correcciones y ajustes en el transcurso del proceso de digitalización. (Ejemplos: Mistral / Brush / Choc)
El termino “cursivas” se utiliza para designar a las tipografías cuya apariencia se asemeja o está inspirada en la tipografía hecha a mano. Las tipografías cursivas exhiben una fluidez y una gracia sensible propia del gesto manual, y una morfología relacionada con el elemento escriptor.
Las tipografías de estilo caligráfico, al igual que las tipografías gestuales imitan o se inspiran en la escritura hecha a mano, aunque en este caso su ejecución ostenta una serie de normas estrictas en cuanto a alineaciones e inclinaciones. Tiene elementos como empalmes, remates y florituras. (Ejemplos: Commercial Script / Shelley / Bickham)
Las tipografías góticas, al igual que las otras tipografías del grupo cursivas o script, se inspiran en la escritura manual, aunque además de presentar normas y reglas muy precisas en su construcción, exhiben una morfología característica. (Ejemplos: Cloister Black / Goudy Text / Fette Fraktur)
En el conjunto de tipografías decorativas, fantasía o graphics, entrarían todos los tipos de letra cuyas características no se ajustan a las de los conjuntos anteriores. Son tipografías que en su mayoría han sido creadas con fines específicos, y donde el aspecto de legibilidad no se ha tenido demasiado en cuenta. A menudo presentan una gran carga expresiva, a través de atributos temáticos.
Las también llamadas fuentes de exhibición son las caligrafías más llamativas, ya que cada uno de ellas están personalizadas y cuentan con unas cualidades específicas. Como son fuentes muy especiales se suelen utilizar únicamente en títulos o en textos que queramos destacar. Definitivamente, no son tipografías adecuadas para bloques de textos. (ejemplos: Shotgun / Umbra / Hobo)
Para terminar este artículo sobre tipografías, encontramos las tipografías en las que las letras son sustituidas por símbolos e iconos, en las que las palabras quedan codificadas. Un ejemplo de esto son los emoticonos.
Como podéis ver en cada una de las familias tipográficas podremos encontrar diferentes fuentes y cada uno de ellas, para diferentes necesidades. Por ello, es importante elegir la letra adecuada para expresar el mensaje que realmente queramos transmitir. SI te ha parecido interesante este artículo no dejes de visitar nuestro blog.